tarde normal (libre)

Habia salido de casa con el skate en la mano y pasando por las calles, el dia estaba aburrido, de hehco todos los dias se me hacian aburridos, las noches eran las interesantes, no habia escuchado de una fiesta esta noche, no sabia si era por los examenes, lo dudaba todos eran irresponsablemente idiotas, por mi parte yo estaba preparado para lo que fuera, llegue al parque y patine hasta la zona dedicada para eso.

Era un día aburrido como cualquiera, papá estaba de viaje en Holanda como siempre y Damien se había ido a la universidad. Eso me deja a mí sola en una mansión vacía. Qué remedio. Salí de Londres con el coche y lo aparqué cerca del parque. Había una zona de skaters, que me recordó bastante los viejos tiempos en Estados Unidos. Entré a ver qué tal, aunque abundaba más chicos y no me esperaba encontrarme a ninguna amiga.

Nada. Todo era bastante aburrido. Skaters y más skaters... Decidí irme y justamente en ese momento, pasé por al lado de un chico. Me sonrió de lado y se la devolví. No le había visto por Londres, así que seguramente era de aquí. Seguí caminando, aunque de todos modos sabía lo que venía luego.

Con un parpadeo lento, vi cómo el chico de antes quedaba en frente de mí con el skate. Algo inesperado, la verdad. Sonreí por su comentario.
-Y tú no eres demasiado guapo como para pasar el día en este lugar? - dije con un tono parecido al suyo.

Me quedé mirándolo. Era... interesante. Un tipo bastante interesante. -Entonces eso nos basta con crear un club, no? - bromeé. Se presentó y por qué dejarme de lado?
-Giselle van Weill. - dije, con media sonrisa pícara. - Encantada de conocerte... - le miré de arriba a abajo. - Scott. - añadí.